Más mujeres de las que pensamos cuentan con una areola de pecho demasiado grande, un problema, que en numerosas ocasiones, descubren las pacientes cuando acuden a la clínica por otra consulta relacionada con otras intervenciones de mamas como puede ser una reducción de pecho.
Y las dudas aparecen en el momento que les compartimos que existe un procedimiento para reducir el tamaño de su areola o pezón. Preguntan:
¿es una operación complicada?
¿duele o provoca falta de sensibilidad en los senos?
¿deja cicatrices?
Si te sientes identificada con esta situación, te adelantamos que es una intervención sencilla, rápida y que no requiere de un largo proceso postoperatorio. Te damos todos los detalles en este blog.
¿QUÉ TAMAÑO SE CONSIDERA NORMAL PARA UNA AREOLA?
Aunque los gustos y el concepto de normal o grande son subjetivos y personales, siendo el criterio individual de cada paciente el factor más importante para su autoestima, en términos médicos y estéticos existen determinadas medidas que ayudan a conocer la proporción adecuada para encontrar el equilibrio en la mama en relación a la zona areola-pezón. El tamaño de una areola normal estaría entre los dos y cuatro centímetros de diámetro. Si está por encima de esa medida la apariencia queda menos armónica. Hay incluso casos de pacientes que presentan una megareola (una areola tan grande que puede llegar a ocupar la totalidad de la mama).
El tamaño de una areola habitualmente estaría entre los dos y cuatro centímetros de diámetro
¿CUÁLES SON LAS CAUSAS HABITUALES DE UNA AREOLA DEMASIADO GRANDE?
La areola mamaria es la zona de piel con una pigmentación levemente más oscura que rodea al pezón. Un pecho con una areola mamaria desproporcionada puede ocasionar un aumento excesivo del diámetro de la misma. Posibles razones:
- Motivos congénitos.
- Alteraciones hormonales.
- Cambios severos de peso.
- Embarazos que deforman los senos.
- La lactancia materna.
- Malformaciones mamarias.
- Mamas tuberosas
- Cambios en el cuerpo durante la pubertad
¿EN QUÉ CONSISTE LA CIRUGÍA DE REDUCCIÓN DE AREOLA?
Esta intervención permite embellecer el aspecto del pecho. Es una técnica quirúrgica sencilla y rápida, considerada menor y cuando no se aplica en combinación con otro tipo de operación sólo requiere anestesia local/sedación y una hora aproximada de duración. Durante el proceso, ambulatorio y sin ingreso hospitalario, el cirujano plástico (que deberá ser especialista en cirugía mamaria y reconstructiva) eliminará una fina capa de piel de la superficie para disminuir el tamaño del área pigmentada de alrededor del pezón, cuidando especialmente el equilibrio en la proporción y la funcionalidad de la zona, que suturará mediante un hilo muy delgado que consigue evitar dejar cicatrices. La reducción de areola no afectaría a una futura lactancia.
La reducción de areola no afectaría a una futura lactancia
¿CÓMO ES EL PROCESO?
La técnica médica para una reducción de areola cambia según la anatomía del paciente y es el profesional en cirugía plástica quien valorará el proceso más adecuado a aplicar. Por norma general, en primer lugar se reseca y elimina la parte exterior o interior de la areola, para retirarlo luego todo junto. Se dibujarán dos círculos concéntricos en la areola, y el área que permanece entre ambos puntos es el espacio de tejido sobrante que deberá extirparse. Finalizada esta fase, se procede a suturar y se conecta la piel de la mama con la areola que ha sido corregida
¿CÓMO SON LOS RESULTADOS?
Esta operación permite al paciente no únicamente reducir el tamaño de una areola demasiado grande, sino que el cambio contribuirá a una mejora completa de las proporciones de la mama, pues en muchos casos soluciona también el problema de asimetría, o de anchura y altura. Y ello ayuda enormemente a la satisfacción con los resultados, visibles desde la tercera semana Además la intervención de reducción de areola no impide seguir disfrutando de la misma sensibilidad en la zona y el pezón que antes. Sólo cambia la forma.
La reducción de areola no impide seguir disfrutando de la misma sensibilidad en la zona y el pezón que antes
CARACTERÍSTICAS DE LA FASE POSTOPERATORIA:
- Proceso de curación rápido y corto y sin grandes molestias.
- Recuperación de las actividades cotidianas en dos-tres días.
- Evitar realizar deporte o grandes esfuerzos físicos durante al mínimo dos semanas.
- La operación incluye una visita postoperatoria donde se evaluará la evolución de la cirugía.
Es importante seguir siempre todos los consejos e indicaciones señaladas por el equipo médico y quirúrgico para que los resultados obtenidos sean naturales y duraderos. Y se recomienda al paciente paciencia para que los puntos reabsorbibles desaparezcan.
¿CON QUÉ TIPOS DE CIRUGÍAS SUELE COMBINARSE UNA REDUCCIÓN DE AREOLA?
Es habitual realizarla junto con otras intervenciones que buscan la proporción de la mama, concretamente:
- Mastopexia o elevación de pecho: trata la ptosis mamaria. Disminuye el tamaño de la areola al mismo tiempo que eleva y posiciona el pezón.
- Reducción de senos: busca resolver las mamas hipertróficas (gigantomastia) y también reduce la areola paralelamente al nuevo tamaño de las mamas, todo con una sola incisión.
- Aumento de mamas con prótesis.
- Reducción de ginecomastia: trata el aumento en la cantidad de tejido de las glándulas mamarias en varones, por razones hormonales.
- Cirugía de pechos tubulares: casi siempre asociada con una megareola o dilatación excesiva de esa zona, se reconstruye el seno tuberoso paralelamente al conjunto areola-pezón, recolocándolo todo para conseguir un tamaño y proporción adecuada.
- Corrección del pezón invertido o retraído: soluciona los pezones que de miran hacia dentro de la mama, dejando una especie de concavidad.
- Lifting mamario: técnica de resección cutánea que tiene como objetivo una adaptación entre el volumen mamario y la cantidad de piel, para una mama más redondeada y turgente.
- Reducción del pezón: corrige los pezones hipertróficos.
Esta intervención puede combinarse con otro tipo de procedimientos.
La diferencia será que en todos estos casos, será necesario anestesia general y la fase postoperatoria tendrá un protocolo distinto y más complejo.
En resumen, someterse a una reducción de areola ofrece las siguientes ventajas:
- Disfrutar de un pecho más bonito y armonioso.
- Terminar con las posibles asimetrías de las areolas.
- Unas areolas que potencian el aspecto juvenil de los senos (pues un tamaño pequeño de las mismas está asociado a menor edad).
- Aumento del bienestar y autoestima, gracias al equilibrio de la apariencia de las mamas, y en consecuencia de la estética completa.
Si aun tienes dudas en relación a este tipo de cirugía y desconoces si es tu caso, no dudes en pedir cita para primera consulta totalmente gratuita con CLEVER. Aquí encontrarás un asesoramiento y diagnóstico totalmente personalizado que te detallará paso a paso todo lo que necesites saber.
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