COMO CUIDARTE A PARTIR DE LOS CINCUENTA: MEJORES RUTINAS Y ERRORES FRECUENTES

A medida que vamos sumando años, la piel va perdiendo elasticidad y firmeza.  En nuestro blog  te ofreceremos soluciones y claves para la rutina facial y corporal adaptada a esta edad. Y además te mostramos consejos fundamentales y recomendaciones idóneas si quieres lucir espléndida.

PRINCIPALES ENEMIGOS A TUS CINCUENTA:

* Los efectos de la menopausia y los cambios hormonales: por el descenso de los estrógenos que aminoran la secreción de sebo y sudor resecando la piel que tiende ahora a mayor deshidratación y fragilidad. También varía el funcionamiento de los melanocitos, responsables del color de la dermis que, menos activos, palidecen la piel y agudizan las manchas.  Un área que sufre sobre todo es la zona alrededor de los ojos. Para combatir estos síntomas las cremas hidratantes deberán reforzar su dosis de vitamina A y E y hacer imprescindible el uso de serums regeneradores.

Crema con vitaminas

* El otro gran enemigo de esta década es la flacidez y el efecto de la gravedad. El rostro y cuerpo pierde definición. A las rutinas de belleza habituales de etapas anteriores se hace más necesario incorporar cremas con un resultado tensor y que traten las arrugas ya más profundas.

* A partir de los cincuenta aparecen molestias o dolores que desencadenas en ocasiones en enfermedades crónicas, como la diabetes tipo 2 o las enfermedades cardiovasculares. Existe menor cantidad de estrógeno y el riesgo de problemas cardiacos y otras dolencias se acentúa.  Los estragos en la piel por la toma de medicación especializada se nota a medio y largo plazo.

Cierta medicación puede afectar a la piel a largo plazo

* Las zonas de rostro, pero especialmente cuello y escote requieren de más ayuda cosmética para un extra de nutrición, firmeza y densidad.

RUTINAS PRINCIPALES PARA ESTA EDAD:

a) Continuar con la doble limpieza que debe iniciarse en la década de los treinta, y mantenerse en los cuarenta, tanto por la mañana como por la noche, con productos de base adecuada y específicos, que retiren todo el maquillaje y los restos de suciedad y polución; la piel crea así una textura preparada para que los cosméticos aplicados actúen con mayor eficacia.

b) Mantener asimismo la doble protección frente al sol con fotoprotección con SPF suficiente según el tipo de piel, todos los días y durante todo el año, y frente al frío y las agresiones externas por la contaminación.

En está década aun es más importante protegerse adecuadamente frente al sol

c) Aplicar vitamina C cada mañana; todavía se cuenta con margen para que los antioxidantes ayuden a retrasar el envejecimiento celular

d) A la crema habitual de noche, preferentemente rica en ácido retinoico, debe sumarse algún despigmentante, o que incluya esta propiedad en la misma, porque las manchas de sol suelen acentuarse especialmente desde esta edad.

e) Introducir una crema de efecto redensificante ya que la piel se hace más fina y el óvalo facial tiende a la flacidez en la mandíbula y el cuello. Es el momento de acudir a componentes como el calcio, isoflavonas de soja, iris o trébol (activan la formación de colágeno y elastina dando grosor a la piel).

f) Practicar ejercicios de fuerza un par de veces por semana para favorecer la masa muscular. Deporte suave de manera regular es importante para ganar agilidad, fortalecer huesos y mantener el peso correcto. Los entrenamientos con pesas y un running ligero ayudan a que la frecuencia respiratoria se incremente y el tai chi o yoga pueden ser excelentes para mejorar el equilibrio y la relajación.

Practicar yoga ayuda al organismo en general

g) El cuidado del cuerpo pasa por una limpieza delicada y poco agresiva, con el fin de evitar elementos que aceleren la deshidratación de la piel como duchas demasiado calientes o baños prolongados. Y en busca de esa prudencia y refuerzo de la barrera cutánea es útil sustituir la leche corporal habitual por un producto que incluya manteca de karité o aceite de jojoba.

Ingrediente muy beneficioso: manteca de karité

h) Recibir tratamientos intensivos y especializados dos veces al año, preferentemente en primavera y en otoño, porque permiten realizar una sesión de belleza y detox intensa que fortalecerán los cuidados del resto de año con un extra de vitaminas y extractos energizantes para dinamizar la piel.

i) Se hace aún más básico darle importancia a la alimentación: incrementar en la dieta verduras y frutas como zanahorias, patatas y naranjas para ayudar a restaurar el colágeno. Potenciarás los resultados de las cremas con la ingesta de complementos nutricionales: suplementos orales de colágeno, ácido hialurónico y Omega 3.

Evitar grasas saturadas

ERRORES MÁS FRECUENTES:

  1. Aplicar excesos de productos, no sólo por el gasto sino porque se trata de una práctica inadecuada con efectos contraproducentes. Ocasiona irritación, dermatitis y desequilibrio en la dermis, incluso en ocasiones es el origen de brotes de acné tardío.
  2. Beber agua insuficiente para nuestro organismo. Ocurre con más frecuencia en invierno dado el clima y son enemigos de una correcta hidratación el alcohol o los diuréticos.

Importante: hidratarse

  1. Menospreciar los beneficios de la nutricosmética. Combinar las cremas con la toma vía oral de determinados complementos es un cóctel que logra excelentes resultados (busca principalmente los de vitaminas, colágeno, levadura de cerveza, onagra y antioxidantes).

Asesórate de como la nutricosmética puede ayudarte

  1. No acompañar de automasajes la aplicación de los cosméticos. Sirven para activar la microcirculación y ralentizar la flacidez cutánea y se deben realizar siempre con movimientos ascendentes y en dirección de la musculatura facial. La ayuda de profesionales o tratamientos en cabina son un extra en este trabajo de activación celular.
  2. Perseguir productos milagro o uno único que lo contenga todo. Lo correcto es una combinación de cosméticos ya detallados en los cuidados recomendados, asignados a la mañana o la noche, con un limpiador, tónico, serum y crema nutritiva a la cabeza del conjunto. Siempre pueden añadirse los extras que aportan mascarillas o ampollas.
  3. Olvidar la zona del cuello. Se hace más patente la flacidez y arrugas de esta parte del cuerpo a partir de los cincuenta años, lo que provoca papada. Esencial mantener por tanto la tersura de su estructura en busca de no perder la definición del óvalo facial, bien con cremas adecuadas o en casos más graves con tratamientos médico-estéticos.

Desde nuestra clínica estaremos encantados de poder asesorarte sobre todas los tratamientos antiaging, de salud y de belleza capaces de ayudarte a combatir los signos de envejecimiento que te inquieten. Para cualquier duda sobre lo más adecuado para ti, cuenta con CLEVER: te citaremos para primera consulta con nuestro equipo médico, de forma totalmente gratuita y sin compromiso. Recuerda que es aconsejable que recibas tu diagnóstico personalizado; para ello únicamente tienes que contactar con nosotros en los teléfonos 954 98 80 53 / 637 64 52 53 y reservar esa primera consulta gratuita.

También puedes visitarnos en C/Enramadilla, Nº 3 Sevilla (muy cerca de estación de tren y metro de San Bernardo)

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